martes, 8 de octubre de 2013

Tema 4: La crisis del Antiguo Régimen 1788 1833


TEMA 4. LA CRISIS DEL ANTIGUO RÉGIMEN 1788/1833

1.- La crisis del reinado de Carlos IV. 1788/1808

Características de su reinado:

­          La desconfianza por la  nobleza de la corte, le lleva a apartar a los ministros ilustrados  y a entregar su confianza a Manuel Godoy de origen humilde.

­          Su reinado coincide con la revolución francesa. (intento de cerrar las fronteras a estas ideas)

­          La condena a muerte de Luis XVI le lleva a declarar la guerra a Francia, en alianza con otras monarquías.

o   La derrota (Paz de Basilea) subordina los intereses españoles a los de Francia.

­          Con el ascenso al gobierno francés de Napoleón, la política española se debatió entre el temor y el pacto para evitar el enfrentamiento con Francia.

­          Su alianza con Francia le lleva a enfrentarse con Gran Bretaña, celosa de su dominio marítimo. Carlos IV perderá toda su flota en la Batalla de Trafalgar 1805.

­          La derrota naval acentúa los problemas de la hacienda: menos ingresos, sobre todo del comercio colonial, y menor tráfico marítimo.

­          Godoy plantea la solución con medidas como:

o   Endeudar a la corona

o   Aumentar las contribuciones

o   Desamortizar las tierras del clero para conseguir recursos para la corona.

­          Esta política levanta una amplia oposición de nobleza y clero en contra de Godoy a la que se suma la antipatía de Fernando (Conjura del Escorial) al verse desplazado ante su padre.

­          El campesinado también estaba descontento por los impuestos a lo que se unen las epidemias, el hambre y la carestía, y el desabastecimiento por el escaso comercio interior.

1.2.- El motín de Aranjuez.

La situación empeora cuando Godoy en 1807 firma con el beneplácito de Carlos IV un tratado con Napoleón: el tratado de Fontainebleau por el cual se permite el paso por territorio español a las tropas francesas a fin de atacar Portugal, aliada de Gran Bretaña.

A cambio, el territorio portugués se repartiría entre Francia, España y el propio Godoy que obtendría un principado.

Las tropas atraviesan la península con el descontento de la población, situándose en lugares estratégicos (Barcelona, Vitoria y Madrid) desde los que desplegaría sus fuerzas y ocuparía la corona española.

 
18 marzo de 1808 estalla un motín en Aranjuez donde está la familia real, que aconsejada por Godoy decide retirarse hacia el sur. El motín popular instigado por la nobleza de palacio busca la caída de Godoy y la abdicación de Carlos IV en su hijo Fernando.

Los amotinados alcanzan sus objetivos lo que evidencia la crisis de la corona española: Carlos IV pide ayuda a napoleón para recuperar la corona lo que lleva a este a ocupar de forma efectiva el territorio en vista de debilidad, corrupción y descomposición de la monarquía española.

1.3.- La monarquía de José Bonaparte.

Carlos IV y Fernando VII son llamados por Napoleón a Bayona abdicando ambos de manera sucesiva en Napoleón.

Este nombra como rey a su hermano José I, convocando cortes para aprobar una nueva constitución, el Código de Bayona y ratificar la corona en su hermano.

El Estatuto de Bayona reconoce la igualdad  de los españoles ante la ley, los impuestos y el acceso a los cargos públicos lo que supone el fin del antiguo régimen. 

Otras reformas del nuevo rey son:

­          Abolición del régimen señorial.

­          Desamortización de tierras de la iglesia

­          Desvinculación de los mayorazgos y tierras en manos muertas.

Estas reformas tuvieron escaso apoyo y nula comprensión, ya que el pueblo no reconoce al rey como legítimo, es un extranjero que basa su poder en las armas. Además las necesidades militares de la conquista, así como la violenta actuación de las tropas francesas levantan mayor hostilidad contra el nuevo rey.

caricaturas y coplillas de José Bonaparte

 2.- La guerra de la Independencia 1808/1814
2.1. La revuelta popular y la formación de las Juntas.

El 2 de mayo de 1808 la familia real se prepara para marchar mientras una multitud se concentra ante palacio para evitarlo y se alza de forma espontanea contra la ocupación francesa.

Las tropas de Murat reprimen duramente esta revuelta, lo que provoca una mayor resistencia popular. En numerosas ciudades surgieron las Juntas de armamento y defensa, para llenar el vacio de poder provocado por las abdicaciones de Bayona.

Las Juntas locales la formaban sobre todo partidarios de Fernando VII para canalizar la actuación popular, luego se formaron las Juntas provinciales que asumen la soberanía en ausencia del rey, declaran la guerra a Francia y pide el apoyo de Gran Bretaña.

En septiembre de 1808 se forma  la Junta Suprema Central para coordinar la lucha y dirigir el país. Esto suponía una ruptura con las instituciones de la monarquía, reconocen a Fernando VII como rey legítimo asumiendo el gobierno en su nombre hasta su vuelta.

El avance francés lleva a la Junta hasta Sevilla y de allí hasta Cádiz 1810, la única ciudad que resistía el asedio con ayuda británica.

2.2.- La resistencia: sitios y guerrillas.

            Napoleón pensaba que esta iba a ser una guerra rápida y fácil en vista de la desorganización de la resistencia española.

No obstante hubo numerosas ciudades que resistieron largo tiempo los bombardeos y el hambre, lo que impidió el avance francés hacia el Levante español. Además las derrotas del Bruc (junio) y Bailén (julio) frenaron la conquista de Andalucía y fuerza a José I a abandonar Madrid y replegar sus tropas al N del Ebro.

 Napoleón tiene que desplazarse a la península con un gran ejército y avanzar durante 4 semanas para recuperar el territorio perdido. José I vuelve a Madrid en enero de 1809 extendiendo su dominio a prácticamente todo el país.

El ejército español se vio incapaz de oponerse al francés, así que la resistencia se organizó de manera espontanea, popular y muy eficaz: las guerrillas. Son grupos locales (partidas) de entre 30/50 miembros (artesanos, campesinos, abogados…etc.) aunque sus dirigentes solían ser personas de mayor formación cultural.

La guerrilla atacaba* por sorpresa, sometiendo a los franceses a una gran presión y desgaste.

En 1812 la guerra en España se vio afectada por la guerra en Europa: napoleón había iniciado una campaña contra Rusia lo que provocó la retirada de muchos soldados en la península. Esta ventaja la aprovechan el ejército español, la guerrilla y el ejército británico (Wellington) venciendo en Arapiles (Salamanca julio 1812). José I abandona Madrid, que fue tomada por Wellington el 12 de agosto. Napoleón presionado en dos frentes, decide abandonar el frente español, permitiendo el regreso de Fernando VII por  el Tratado de Valençay

 
2.3.- Actitudes sociales, políticas e ideológicas.

La invasión napoleónica despertó dentro de la sociedad española diversidad de opiniones: (no obstante, aun con diferencias, el pueblo afrontó la guerra como un movimiento de defensa y resistencia en defensa del rey aunque adoptaría actitudes revolucionarias en algunas de sus decisiones) 

  • Afrancesados: españoles que colaboran con Napoleón y José´ I, intelectuales, altos funcionarios y parte de la nobleza, todos fieles a la idea del despotismo ilustrado, querían un programa reformista y un poder fuerte para modernizar España sin los riesgos de una revolución. Al acabar la guerra, marcharan al exilio.
  • Frente patriótico: formado por el gran grueso de la población que se oponía a la invasión. Sin embargo dentro de este grupo había varias posturas:
    • Clero y nobleza quieren la vuelta de Fernando VII como rey absoluto, defendiendo la tradición y la religión, rechazando cualquier cambio.
    • Los ilustrados quieren la vuelta del rey, pero con un programa de reformas para modernizar el país.
    • Los liberales, burgueses, profesionales, etc.… ven la ocasión para implantar en España un sistema político liberal, con una constitución, soberanía popular, división de poderes, abolición de privilegios y gremios e instituciones representativas.

 

3.- Las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812

3.1.- La convocatoria de Cortes.

La Junta Suprema Central se había demostrado ineficaz para dirigir la guerra, disolviéndose en enero de 1810, convocando Cortes para que la nación decidiera su destino.

Mientras se reúnen las Cortes se mantiene una regencia de cinco miembros al tiempo que se consultaba al país (Juntas provinciales y ayuntamientos) sobre las reformas a tratar en las cortes. La recogida de dicha información fue difícil pero la nefasta actuación de Carlos IV que había llevado al país a la ruina, les hizo coincidir en pedir garantías contra el poder absoluto de la corona.

Elegir a los representantes y reunirlos fue difícil, dado el ambiente de guerra. Fueron muchos los casos en los que sustituyeron los representantes por otros de la propia ciudad de Cádiz, dada la imposibilidad de llegar allí.

Cádiz muy cercana a las ideas liberales hizo que muchos delegados defendieran estas ideas.

Las cortes se abrieron en septiembre de 1810 con una cámara única, petición de los liberales, al  igual que la aprobación de la soberanía nacional: el poder reside en el pueblo representado en las Cortes.

 

3.2. La Constitución de Cádiz.

La preparación del proyecto lo elabora una comisión (marzo de 1811). Empezó a debatirse en agosto y se promulga el 19 marzo de 1812, día de San José “La Pepa”.

Es un texto largo de 384 artículos:

­          Contiene una declaración de derechos del ciudadano:

o   Libertad de pensamiento y opinión

o   Igualdad ante la ley

o   Derecho de petición

o   Libertad civil

o   Derecho de propiedad

o   Reconocimiento de los derechos legítimos del individuos que hemisferio, peninsulares y americanos)

­          La estructura del Estado es una monarquía limitada con división de poderes:

o   Poder legislativo: en las Cortes unicamerales, representan la voluntad nacional: Elaboran leyes, aprueban presupuestos, tratados internacionales, manda sobre el ejercito…Los diputados lo eran durante 2 años siendo inviolables

o   Poder ejecutivo: el rey tiene la dirección del gobierno e interviene en la elaboración de las leyes, por iniciativa y sanción con veto suspensivo durante 2 años. Las decisiones del rey debían ser refrendadas por los ministros, sometidos a responsabilidad penal.

o   Poder judicial: competencia exclusiva de los tribunales, desarrollan los principios de un Estado de derecho: códigos únicos, civil, criminal y comercial; inviolabilidad de los jueces, garantías procesuales…

­          Otros temas planteados:

o   Reforma de los impuestos y la hacienda

o   Creación de un ejército nacional y servicio militar obligatorio

o   Implantación de una enseñanza primaria, pública y obligatoria.

o   División del territorio en provincias, cuyo gobierno interior correspondía a las diputaciones provinciales.

o   Se forman los ayuntamientos con cargos electos.

o   Se crea la Milicia Nacional local y provincial

o   Se afirma la confesionalidad católica del Estado.

3.3.- La acción legislativa de las Cortes

Además del texto constitucional se aprobaron una serie de decretos destinados a eliminar el antiguo régimen:

­          Supresión de los señoríos jurisdiccionales, mientras que los territoriales pasa a ser propiedad privada de los señores.

­          Se eliminaron los mayorazgos y se desamortizan las tierras comunales para recaudad capitales.

­          Se abolió la Inquisición (a lo que se oponen absolutistas y clero)

­          Libertad de imprenta al servicio de la opinión pública, aunque se excluían las cuestiones religiosas que permanecían bajo control de la censura eclesiástica.

­          Se establece la libertad de trabajo, la supresión del gremio y la unificación del mercado.

Todos estos aspectos marcan las líneas de la modernización del país, ya se elabora un marco legislativo muy avanzado. Sin embargo, la obra de Cádiz no tuvo una gran incidencia ya que la guerra impidió la aplicación de estas leyes y al acabar la guerra Fernando VII las declara: “nulo y de ningún valor”

 
4.- El reinado de Fernando VII 1814/1833

4.1.- La restauración del absolutismo 1814/1820

La vuelta del monarca suscita la desconfianza de los liberales, ya no le creen dispuesto a aceptar los cambios. Para evitar problemas se dispuso que el rey viajara directamente a Madrid y firmara la constitución, aceptando la nueva situación política.

Fernando VII temeroso acata estas condiciones, pero los partidarios del absolutismo, nobleza y clero, aprovechan esta la situación imperante para deshacer la obra liberal y volver al antiguo régimen. Se organizan y demandan la restauración del absolutismo (manifiesto de los persas) pidiendo al pueblo su adhesión al rey. Este, viendo la debilidad de los liberales, emite un Real Decreto de 4 de mayo de 1814 anulando la constitución y las leyes de Cádiz al tiempo que anunciaba la vuelta del absolutismo.

Paralelamente los dirigentes liberales son detenidos o asesinado mientras que otros huyen al exilio.  

La monarquía recupera las antiguas instituciones del régimen señorial y la Inquisición, mientras que en Europa la derrota de Napoleón supone la restauración del viejo orden con el Congreso de Viena y la Santa Alianza para defender el absolutismo y la intervención en cualquier país para frenar el liberalismo.

Fernando VII debe hacer frente a graves problemas:

­          país destrozado por la guerra:

o   grandes pérdidas humanas y materiales

o   Abandono de la agricultura y comercio

o   Hacienda en bancarrota: sin ingresos (impuestos, metales preciosos, productos...)  y costeando grandes gastos militares ya que las colonias intentan independizarse.

­          Cambia la mentalidad de la sociedad.

o   El campesinado no quiere pagar las rentas señoriales y los viejos tributos

o   La libertad de fabricación y de mercado había favorecido a la burguesía que no quiere volver al régimen gremial.

o   Los guerrilleros, ahora integrados en el ejército protagonizan numerosos pronunciamientos pidiendo reformas.

­          El gobierno fue incapaz de hacer frente a tales problemas, levantar la hacienda, hacer frente a movimientos independentistas, a los pronunciamientos liberales que evidenciaban la fragilidad de la monarquía absoluta. La única solución fue la represión.

4.2.- El Trienio Liberal 1820/1823

El 1 de enero de 1820 el coronel Rafael de Riego al frente de una compañía acantonada en las Cabezas de San Juan (Sevilla) que iban a embarcar hacia las colonias americanas, se subleva y recorre Andalucía proclamando la constitución de Cádiz.

            La pasividad del ejército, la acción de los liberales y la neutralidad de los campesinos obligaron al rey a aceptar la constitución el 10 de marzo. Así se forma un nuevo gobierno, se proclama una amnistía y se convoca elecciones a cortes.

            De estas elecciones salió una mayoría de diputados liberales que inician la restauración de las reformas de Cádiz:

­          libertad de la industria y  abolición de gremios. Se eliminan las trabas a la libre circulación de mercancías, lo que favorece el desarrollo de la burguesía.

­           supresión de señoríos y mayorazgos, venta de tierras del clero

­          disminución del diezmo y reformas del código fiscal, penal y del ejército.

­          Se moderniza la política y la administración, se forman ayuntamientos y diputaciones

­           se reconstruye la Milicia Nacional para garantizar el orden y defender la constitución.

Sin embargo, esta política reformista no es del gusto de todos:

Fernando VII se opone a estas reformas que ha aceptado por la fuerza, las veta y conspira contra el gobierno solicitando la ayuda de las potencias absolutistas.

            Pero las reformas no son del gusto del campesinado, ya que no se ha facilitado el acceso a la tierra, aunque se abolieran los señoríos jurisdiccionales. Los antiguos señores ahora dueños arrendaban sus tierras a los campesinos de la misma manera.

Tampoco la rebaja de los impuestos fue importante y el pago de estos con dinero efectivo llevó a los campesinos a una situación desesperada, ya que vender productos en una sociedad autosuficiente era muy complicado. Así los campesinos más pobres se sumaron a la agitación antiliberal.

La nobleza y el clero, perjudicadas por las reformas, impulsaron las revueltas contra los gobiernos liberales. En 1822 hubo partidas absolutistas en Cataluña, Navarra, Galicia y el Maestrazgo (Castellón y Teruel) llegaron a tener 280.000 miembros llegando a establecer una regencia absolutista en Seo de Urgel en 1823.

Dentro de los liberales también hubo división:

­          Moderados, piden reformas limitadas que no perjudicaran a nobleza y burguesía propietaria

­          Exaltados, piden reformas radicales favorables a las clases medias y populares.

 

4.3.- La Década Ominosa. 1823/1833

El fin del trienio vino de la mano de las potencias europeas que a través de la Santa Alianza respondieron a la petición del rey de intervenir en la península. Así en abril de 1823 entran (otra vez) en la península los 100 mil hijos de San Luís, al mando del Duque de Angulema y reponen en el trono a Fernando VII.

 Las potencias europeas, temerosas de las continuas revueltas del país, recomiendan al rey una serie de reformas y una amnistía para dar estabilidad a la monarquía.

Sin embargo, Fernando VII inicia una dura represión contra los liberales, depura la administración y el ejército, persiguiendo durante toda la década cualquier idea liberal.

El gran problema de la corona seguirá siendo el económico, incrementado por la pérdida de las colonias americanas que disminuyó los ingresos de la ya maltrecha hacienda. Así en 1825 el rey busca el apoyo del sector moderado de la burguesía financiera e industrial de Madrid y Barcelona.

Esto provoca la desconfianza de los sectores más realistas más conservadores que se agruparon en torno a Carlos María Isidro, hermano y posible heredero de Fernando.

 

4.4.- El conflicto dinástico.

Fernando no había tenido descendencia masculina, tenía una hija Isabel nacida en 1830. Por ello se plantea un grave conflicto sucesorio, la Ley Sálica impedía el acceso al trono de las mujeres, por lo que el rey deroga dicha ley e impone la Pragmática Sanción que posibilitaría el reinado de su hija.

Este cambio en la legislación, despertó la oposición de los más ultraconservadores, los carlistas que reclamaban en el trono a Carlos, hermano del rey.

Esta situación derivó en un enfrentamiento ideológico:

­          Con Carlos se agrupaban los sectores que defendían el Antiguo Régimen, opuestos al liberalismo.

­          Por su parte, Mª Cristina defensora de los derechos de la aún niña Isabel, vio que tenía que buscar sus apoyos en los sectores cercanos al liberalismo.

Cuando Mª Cristina, nombrada regente en la enfermedad del rey formó un gobierno de carácter reformista otorgando una amnistía que permitió el regreso de muchos liberales preparándose para el enfrentamiento con los carlistas.

Fernando VII muere reafirmando a su hija en el trono mientras que en el norte y Cataluña los partidarios de Carlos inician un levantamiento dando lugar a la 1º guerra carlista.

 

6.- La independencia de la América Hispana

6.1.- la América española a finales del siglo XVIII

A lo largo del XVIII en estos territorios se había iniciado una etapa de prosperidad basada en el comercio y en la explotación de plantaciones dedicadas al café, azúcar, tabaco, etc. con mano de obra esclava.

Este crecimiento dio lugar a un poderoso grupo social, la burguesía criolla, de raza blanca pero nacida en América. Este grupo, prospero, educado y conocedor de las ideas de la ilustración se quejaban de ser marginados de los cargos públicos, sometidos a fuertes impuestos y controlados por la metrópoli. Entre ellos se irán fraguando los proyectos de independencia, más motivados por el éxito de la independencia de EEUU y la ayuda británica, deseosa de controlar el comercio americano.

6.2.- El proceso de independencia.

En 1808, en la guerra de la independencia, los criollos habían formado sus propias Juntas como en la península, no aceptando la autoridad de José I, pero aunque fieles a Fernando VII no reconocieron la autoridad de la Junta Central Suprema, declarándose muchas de ellas independientes de la metrópoli en 1810.

Entre estas:

­          Virreinato del Río de la Plata con José de San Martín que proclama la independencia de la República argentina.

­          Virreinato de Nueva Granada y Venezuela con Simón Bolívar

­          México con Miguel Hidalgo y José Mª Morelos.

Durante las cortes, estos territorios fueron considerados territorios españoles reconociendo los derechos criollos pero no fueron capaces de hacer frente al movimiento independentista.

Al acabar la guerra, Fernando VII manda un numeroso ejército que pacifica Nueva Granada y México pero que tuvo que reconocer la independencia de Paraguay y Argentina.

En años posteriores la intransigencia de la monarquía estimula el crecimiento del movimiento libertador:

­          San Martín derrota a los españoles en Chacabuco declarando la independencia de Chile 1818

­          Simón Bolívar también los derrota en Boyacá y Carabobo, dando lugar a la formación de la Gran Colombia: Venezuela, Colombia, Ecuador y Panamá.

­          Agustín de Iturbide con el apoyo de la iglesia y las clases poderosas, logra la independencia de México.

­          Tras la derrota de Ayacucho donde Antonio José de Sucre vence a los españoles y la independencia de Perú y Bolivia se acaba la presencia en la América continental.

­          Sólo las Antillas (Cuba y Puerto Rico) y las Filipinas permanecen en poder español.

6.3.- Los problemas de las nuevas naciones americanas.

  • El sueño de los libertadores de crear una América unida se mostró imposible los interese de los más favorecidos, comerciantes y terratenientes llevaron a numerosas guerras y al fraccionamiento del territorio en múltiples repúblicas.
  • El poder de caudillos locales, el peso del ejército y el recurso a las armas fue la tónica general de la sociedad  hispanoamericana.
  • Los criollos que habían liderado el proceso, abandonan a su suerte a la población india, negra o pobre lo que llevará a numerosos enfrentamientos.
  • La independencia no consiguió hacer lo propio con la economía que siguió dependiendo,  ahora,  de Gran Bretaña y EEUU.

 

­           

           

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario